una suave brisa. un chispazo.
una especie de laxa tensión, un fino cable de energía amarilla, una luz tenue y movediza suspendida en medio...
silencio
un estremecimiento mínimo. pequeñas partículas que empiezan a girar en torno a un centro todopoderoso.
mientras la materia se ponía en movimiento, las energías empezaban a igualar sus caudales
y así, las partículas empezaron a girar en una misma órbita, a tal punto, que ahora, su propio movimiento las sostenía
y entonces...
quietud
tensa calma
un aura, una intensa luz azul yace acurrucada en un rincón
a su alrededor
y una llamarada a su alrededor, la abrasa, la envuelve, queriendo fundirse, mimetizarse, confundirse
y cuando finalmente se unen, hay un estallido de calor que arrasa con las fuerzas, y todas las medidas dejan de tener sentido, y las partículas giran sin control, emanando un haz de luz multicolor
y desde el centro, una columna de energía en estado puro, como una lengua color rojo intenso, se abre paso a través del vacío
ahora estoy en una habitación chiquitita, húmeda, mugrienta
iluminado por el lastimoso resplandor de una puta bombita de 25
tenés fuego?
mezclado por
domingo, agosto 08, 2004 | 7:57 p. m.