y cuando termina de hablar, y mientras el mundo sigue girando ahí al costado, me dice que nos bajemos, y ahí nomás me muestra el daguerrotipo del momento en que le estoy poniendo el cartel de "suker" arriba del marote
así que, sin decir agua va, apretó el botón de "eject", ese que tiene como un triangulito suspendido a discreta distancia de una rayita horizontal, y yo salí despedido hacia el limbo
bueno, bah, hay que reconocer que el limbo se parece bastante al living de andrea y patricia
y mientras una jauría de leones se nos mete por el cuerpo y nos rayona el alma, hacemos pedazos el aire, lo destruimos a gritos, a carcajadas. y los ojos se nos salen de las órbitas, como si nada de este mundo importara más que nosotros, en ese segundo, en ese lugar.
el tiempo es extraño. y ya no sé si era antes, o después. o tal vez, en ese mismo momento, en un universo, o multiverso paralelo, otra expresión de mi mismo recorría esa piel. tan conocida, y tan extraña. ajena, pero familiar. apenas unos centímetros bajo las manos algunas vez... y esa piel generosa que se ofrece a mis ojos, que se graba en mi retina y en mis haluros de plata.
y cuando me doy vuelta, la veo venir
hace años que no la veía venir. tanto que su sonrisa tan familiar y ese peinado extraño se me tiran encima, y me resulta difícil entender porqué
hasta que entiendo. y cuando entiendo, entiendo que no importaba entender. que lo único que importa es que está ahí, y yo tenía ganas de verla. y ella a mi. y eso siempre es bueno. sibre todo porque le mundo sigue girando ahí afuera. y aunque la piel no tenga que ver con el peinado, y las carcajadas no vengan de esa sonrisa, por un segundo todo está en su lugar.
y una vez en la vida, durante un rato, parece que todo funciona bien.
me encantan las teorías históricas que quieren encontrar las causas de un suceso, en situaciones posteriores.
me gusta la atemporalidad absurda. deliberadamente imposible.
está bien pensar que colón pudo llegar a América gracias a la apertura producida por la era aluvial de principios del siglo XX
-me compré una remera
-de que color
-ESCARLATA
-no, te pregunté el color, no el nombre del local